¿Qué es el inframundo?

En la cultura prehispánica, el más allá era un espacio físico debajo de la tierra al que se podía acceder a través de los cenotes y a donde las almas llagaban para continuar su viaje al siguiente ciclo vital.

Xibalbá Sello

Cenotes, llaves hacia Xibalbá

Estos ojos de agua en medio de la selva son entradas interconectadas que se extienden por la Península de Yucatán, parte del área donde se establecieron antiguas civilizaciones prehispánicas.

La ceiba, árbol sagrado

Con su tronco alto y fuerte, además de abundar en Yucatán, conectaba los tres planos del universo. Sus hojas acarician los cielos, su cuerpo lo conecta con la tierra y sus raíces se adentran en ella hasta tocar el agua.

El Popol Vuh

Las escrituras sagradas que recopilan los místicos relatos de la mitología prehispánica, incluida la descripción de Xibalbá y las deidades que en él habitaban.

Las divinidades de Xibalbá

Xibalbá era también un sitio de peregrinaje, por lo que además de sus dioses residentes como Hun-Camé y Vucub-Camé, pasaron por sus niveles personajes como los gemelos divinos, Hunahpú e Ixbalanqué.

Un sitio de transición

Lo desconocido puede provocar cautela y despertar el asombro. Sin embargo, para la cultura prehispánica, la muerte era solo el siguiente paso posterior a la vida dentro del plano terrenal. El alma de una persona solo debía continuar su camino y era en Xibalbá donde continuaba el viaje.

Xibalbá Sello